Los grupos criminales que antes se dedicaban a intervenir los oleoductos estatales se centran ahora en el contrabando de combustible en el país.
Según un informe publicado el jueves por el periódico Reforma, bandas de ex huachicoleros, o ladrones de combustible, están coludidos con funcionarios de aduanas para introducir combustible en México de forma ilegal a través de puertos marítimos y la frontera norte.
La colusión se produce principalmente en las fronteras terrestres de las ciudades tamaulipecas de Reynosa, Matamoros y Nuevo Laredo, y en los puertos de Altamira y Tampico, en el mismo estado.
Citando fuentes federales, Reforma dijo que todos los días entran al país decenas de camiones cisterna con combustible comprado en Texas que no es reportado oficialmente a la aduana. El diario también dijo que el combustible se importa con documentación falsa que permite a los importadores evadir impuestos.
Además, el informe señala que los grupos criminales están sacando el combustible robado al mar en barcos que posteriormente regresan a los puertos mexicanos y pasan el combustible por la aduana con permisos de importación falsos para legalizarlo, es decir, el blanqueo de combustible.
El robo de combustible está ahora [ocurriendo] en el comercio exterior, dijo Raquel Buenrostro, jefa de la agencia tributaria federal SAT, en una reciente reunión con legisladores.
Roban [el combustible] en el Golfo [de México], lo sacan a mar abierto y lo traen de vuelta con licencias de importación falsas. Como es robado, valía la pena pagar impuestos. Ahora [los grupos criminales] ni siquiera los pagan, dijo.
Buenrostro dijo que el SAT, que supervisa las aduanas, está trabajando para resolver el asunto de los permisos de importación falsos.
Según informes federales, una vez que el combustible entra de contrabando en el país es transportado a gasolineras en el noreste de México que son operadas por grupos criminales. El Ejército y la Marina, que el año pasado recibieron la tarea de eliminar la corrupción en los puertos de entrada, han reforzado la supervisión de las aduanas en las últimas semanas en un intento por detener la importación ilegal de gasolina y diesel, dijo Reforma.
La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) del gobierno federal, la Guardia Nacional y las aduanas están investigando las redes criminales que operan en las fronteras terrestres y los puertos. La UIF está investigando el transporte, el almacenamiento y la venta de combustible de contrabando para identificar la ruta del dinero de los grupos criminales.
Según el SAT, sus ingresos fiscales han caído debido a la importación ilegal de combustibles. El organismo informó que sus ingresos por impuestos al consumo del IEPS disminuyeron en 20.300 millones de pesos (1.000 millones de dólares), o 35,7%, en el primer trimestre de 2021 en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Esta situación se debe al contrabando … de combustible. El contrabando es llevado a cabo por … el crimen organizado. … Además de tener un impacto negativo en la recaudación de impuestos, afecta a la competencia leal en el mercado [de los combustibles], dijo el SAT en un comunicado.