La marina incautó más de una tonelada y media de cocaína y detuvo a siete personas que transportaban la droga en una embarcación al sur de las Islas Marías, en Nayarit, el 6 de abril.
Los marinos estaban de guardia costera a unas 60 millas náuticas (aproximadamente 111 kilómetros) al sur del archipiélago de Nayarit cuando hicieron el descubrimiento.
Mientras inspeccionaba un barco pesquero, el personal de la marina observó una serie de anomalías en la maquinaria del barco y en la identificación de la tripulación. Decidieron llevar la embarcación a Balleto, en la isla María Madre, para examinarla más de cerca.
Una vez en el puerto, con la ayuda de perros rastreadores se encontró la droga en 80 paquetes envueltos en cinta, con un peso de 1.583 kilogramos.
La incautación eleva el total de la droga encontrada desde principios de marzo a 8.400 kilogramos, que incluyen cargamentos de cocaína y marihuana.
El 27 de marzo, en Ensenada (Baja California), el ejército se incautó de 119 kilogramos de metanfetamina y 10 bolsas de otra sustancia granulada, ocultos en la parte trasera de un avión abandonado.
El 23 de marzo se encontraron 420 paquetes de cocaína en Janos, Chihuahua, con un peso de 418 kilogramos, dentro de 21 de las 973 cajas de grasa vegetal congelada que se transportaban en camión.
El 20 de marzo, las autoridades incautaron dos toneladas y 443 kilogramos de marihuana en un puesto de control de seguridad en la carretera Durango-Mazatlán. Los informes locales afirmaron que la droga se transportaba entre sacos de cebolla.
El 10 de marzo, soldados detuvieron a siete presuntos narcotraficantes en Tonalá, Chiapas, que tenían en su poder siete sacos con 2,850 kilogramos de clorhidrato de cocaína y cinco armas de fuego.
El 28 de febrero, la policía militar se incautó de más de 2.000 kilos de la misma droga en la carretera Durango-Villa Unión, escondidos entre bloques de construcción. El hallazgo no se produjo hasta que se detuvo el camión por tener los cristales tintados.