Para evitar que el presidente López Obrador hable sobre las próximas elecciones, incluso promoviendo al partido gobernante y criticando a sus opositores, el Instituto Nacional Electoral (INE) podría llegar a detenerlo, sugirió el secretario general del partido gobernante Morena.
López Obrador, que ya ha recibido una advertencia por violar las normas del INE sobre lo que puede y no puede decir durante el periodo oficial de campaña de cara a las elecciones del 6 de junio, reconoció él mismo esa posibilidad el lunes por la mañana al declinar responder a una pregunta sobre si propondría una reforma para reducir el coste de la celebración de las elecciones.
… Ellos [el INE] podrían multarme o incluso arrestarme, así que es mejor que no [comente], dijo el presidente a los periodistas en su habitual conferencia de prensa.
Citlalli Hernández, secretaria general de Morena -el partido que fundó López Obrador-, afirmó que el INE buscará impedir que el presidente haga comentarios sobre la elección de cualquier manera, incluso haciéndolo detener, lo cual está permitido legalmente por 36 horas como último recurso.
Acusó al presidente del INE, Lorenzo Córdova, y al consejero Ciro Murayama de ser operadores del Partido Acción Nacional, del Partido Revolucionario Institucional y del Partido de la Revolución Democrática, que han formado una alianza para impugnar las elecciones del 6 de junio en las que se renovará la totalidad de la cámara baja del Congreso.
Ahora resulta que el INE amenaza con detener a nuestro presidente por hablar de varios temas en su conferencia de prensa matutina. Es indignante que el árbitro electoral no vea lo que la oposición está haciendo para detener el avance de Morena, dijo Hernández.
Por el contrario, Lorenzo Córdova y Ciro Murayama están tomando partido para detener nuestro movimiento. Pero que le quede claro a este árbitro [electoral] pagado, que le quede claro a la oposición: somos demócratas decididos a transformar este país, dijo.
… Decimos con toda claridad: no vamos a permitir que ataquen la democracia y ataquen la esperanza.
El INE amonestó a López Obrador la semana pasada por hablar de los programas sociales del gobierno en su conferencia de prensa matutina, o mañanera, del 16 de abril.
El presidente habló de asuntos relacionados con logros y acciones de gobierno, dijo el INE, añadiendo que sus comentarios podrían ser clasificados como propaganda gubernamental.
El INE envió un documento a López Obrador en el que le recuerda que, durante el periodo oficial de campaña -que va de principios de abril a principios de junio-, no puede hablar de los logros del gobierno ni pronunciarse sobre su preferencia por un partido político o alianza sobre otro.
El presidente también tiene prohibido comentar las plataformas políticas de los distintos partidos, hablar de las maquinaciones internas de los partidos y sus estrategias electorales, referirse a candidatos concretos, hablar de los resultados de las encuestas y tratar de influir en los ciudadanos sobre el sentido del voto.
Cumplir con las reglas es un reto para López Obrador porque está acostumbrado a utilizar sus largas conferencias de prensa de los días de semana para promover su administración y lanzar duros reproches a los críticos del gobierno, incluidos los partidos de la oposición.
En entrevista con los medios, la consejera del INE Claudia Zavala dijo que si el presidente vuelve a violar las reglas sobre lo que no puede decir, podría recibir una amonestación formal. Si se vuelve a incumplir, podría ganarse una multa de hasta 708.500 pesos (35.650 dólares), dijo el lunes.
La última medida (…) permitida en la legislación (…) es el arresto por 36 horas, dijo Zavala antes de reconocer que el presidente ha mostrado mayor cuidado en las últimas conferencias de prensa para asegurarse de no caer en la ley.
En su mañanera del lunes, López Obrador dijo que algo de lo que no dejaría de hablar era del estado de la democracia porque México es el país con más fraudes electorales de la historia.
El presidente, que afirma que le robaron la presidencia en las elecciones de 2006 y 2012, dijo que uno de los cambios necesarios es tener autoridades electorales imparciales y no del lado del partido conservador.
Recientemente, López Obrador se enfrentó al INE después de que éste impidiera a dos candidatos del partido Morena concurrir a las elecciones para gobernador en Guerrero y Michoacán por no haber reportado sus gastos de precampaña.
Calificó la decisión del INE como un ataque a la democracia y se comprometió a presentar una iniciativa después de las elecciones de este año para reformar el organismo electoral y garantizar que sea verdaderamente autónomo e independiente.