El presidente López Obrador dijo que verificar la veracidad de un tuit que destacó la semana pasada no es de su competencia, luego de que un periodista lo cuestionó al respecto en la conferencia de prensa del miércoles por la mañana.
El 5 de agosto, el presidente se refirió a un tuit insultante supuestamente hecho en octubre pasado por el juez del Tribunal Electoral Reyes Rodríguez, que decía: Ojalá se muera ese viejo imbécil (el presidente) en el Palacio Nacional.
El presidente había utilizado el tuit para apoyar su argumento de reformar el Tribunal Electoral y el Instituto Nacional Electoral.
Es degradante… Lo menciono porque hay una crisis en la institución, dijo López Obrador después de que el tribunal destituyera a su presidente la semana pasada y nombrara a Rodríguez en su lugar.
Resulta que el presidente que eligieron me insultó en una ocasión. Lo menciono para demostrar las características de las personas que ocupan estos cargos tan importantes.
Alrededor de una hora después, Rodríguez negó en Twitter haber escrito el tuit, afirmando que era un montaje para desacreditarlo. Poco después presentó una denuncia ante la fiscalía federal, dijo.
El miércoles por la mañana, el presidente rechazó que le correspondiera comprobar si el tuit era real a pesar de que había utilizado la información para atacar la reputación de un juez. Un periodista le preguntó: ¿El tuit era falso o no era falso? ¿Se ha investigado si era falso o no?.
Eso no depende de mí, respondió, antes de criticar a los opositores y vincular el asunto a la hipocresía conservadora.
Lo que creo es que los conservadores son hipócritas, la doctrina del conservador es una hipocresía, y les acusó de eludir la responsabilidad de sus actos: [dicen] no fui yo, no fui yo.
Intensificó su crítica, tachando a sus oponentes de delincuentes deshonestos. Pueden ir a misa los domingos y golpearse el pecho y confesarse, comulgan, y salen a mentir y robar, y vuelven el domingo a confesarse y comulgar.
El periodista insistió una vez más para que se aclarara si el tuit era falso.
En respuesta, el presidente dio a entender que el tuit era real, y añadió a su lista de críticas. Son capaces de eso [el tuit] y más. El pensamiento conservador es muy autoritario y muy hipócrita; son, para ser claros, clasistas, son racistas, discriminan y son muy corruptos. Su verdadero dios es el dinero, dijo.
La verdad en los medios de comunicación ha sido un tema candente en las ruedas de prensa matutinas, especialmente desde que el presidente añadió una nueva función para abordar las afirmaciones falsas dirigidas a su administración. La función quién es quién en las mentiras de la semana se introdujo el 30 de junio, y desde entonces tiene lugar cada miércoles.
El reportaje ha sido criticado por los periodistas, algunos de los cuales han hecho uso de su derecho de réplica en la conferencia para combatir las afirmaciones hechas contra sus reportajes. Al menos en una ocasión, se presentó un artículo y se desacreditó como mentira, pero el presentador no logró aislar ninguna falsedad en particular.
La respuesta común a cualquier supuesta falsedad es simplemente declarar que es una mentira sin aportar ninguna prueba que apoye la afirmación.