(A Todo Momento) — Luego 12 años como militante del partido que ayudó a fundar, el expresidente Rafael Correa abandonó Alianza País, luego de que el Tribunal Contencioso Electoral reconociera a Ricardo Zambrano (cercano al actual presidente ecuatoriano) como secretario ejecutivo de la organización. ABC
Junto a Correa pidieron salir de los registros de AP 28 legisladores y unos cuantos excolaboradores suyos. El expresidente firmó el documento en Babahoyo, la capital de la provincia de Los Ríos, donde se encontraba el martes en campaña promoviendo el “no” en la consulta popular convocada por su sucesor y que lo inhabilitaría para volver a ser candidato a la Presidencia de la República.
“Pueden quedarse con todo, los edificios, el número de lista, los recursos y hasta el color, pero nosotros tenemos la militancia”, dijo Correa, visiblemente afectado.
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Tras la notificación del TCE, los correistas que se encontraban en las sedes del movimiento debieron abandonar el local. Antes de irse, pintarrajearon las paredes, el piso y hasta un televisor con leyendas ofensivas contra sus excorreligionarios. El acto ha sido calificado de vandálico.
La decisión de TCE de reconocer a la directiva del ala morenista de AP se produce tras rechazar un recurso de apelación presentado por Gabriela Rivadeneira, exsecretaria ejecutiva del movimiento y afín a Correa, que impugnaba la decisión del CNE de reconocer a la directiva de Ricardo Zambrano.
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La vicepresidenta de la República, María Alejandra Vicuña, dijo que una “afiliación o desafiliación” es una decisión voluntaria, y que lo ocurrido ahora con algunos militantes de AP “forma parte de su legítimo derecho”. Para el analista político César Ulloa lo sucedido “es el resultado de una mayoría conversa al morenismo (Lenín Moreno) que es quien tiene, hoy, el ejercicio real del poder”.