No todos los días nace un nuevo buscador en internet, menos aún uno dedicado a la pornografía como es el caso de Boodigo, herramienta desarrollada por exempleados de Google que pretende convertirse en la puerta de entrada a la industria del entretenimiento para adultos en la red.
Boodigo debutó oficialmente el pasado lunes y “ha despegado como un cohete”, comentó a Efe en una entrevista telefónica uno de sus fundadores, Colin Rowntree, quien es a su vez el dueño de Wasteland.com, portal dedicado al porno fetichista.
Rowntree se asoció con la empresa tecnológica angelina 0x7a69 cuyos ingenieros dedicaron más de un año a desarrollar el sistema sobre el que descansa Boodigo, incluido un algoritmo que da prioridad a enlaces que son ninguneados por los buscadores generalistas.
“Google o Bing han ido evitando gradualmente el contenido de la industria para adultos y eso (nos) ha supuesto una gran frustración. Si alguien está buscando vídeos de felaciones y van a Google lo que obtienen es un artículo de Wikipedia y consejos de Cosmopolitan. Para cuando dan con lo que buscaban puede que sea robado”, explicó Rowntree.
A pesar de ser para muchos un tema tabú, la pornografía es tremendamente popular en internet como muestran las estadísticas de Google donde el término “porn” (porno, en inglés) tiene un ratio de interés que no baja del 80 por ciento desde 2010 en la escala (1-100) que mide las tendencias del buscador.
Boodigo está construido sobre un doble proceso de verificación que en un primer lugar asocia las palabras claves de la búsqueda con el contenido y después comprueba que el mismo pertenezca a entidades fiables y no a sitios piratas con intenciones fraudulentas o maliciosas, comentó su responsable.
El motor de búsqueda fue diseñado, igualmente, para preservar el anonimato del usuario. Según su política de privacidad, Boodigo no emplea “cookies” ni “cualquier otro tipo de tecnología de rastreo”.
“Eso nos hace distintos de Google y Bing, y era otra motivación para hacerlo”, declaró Rowntree, para quien algunos de los ingenieros que desarrollaron el producto son desencantados de Google ya que estaban “hartos” de cómo esa compañía gestiona los datos que recopila.
Desde su estreno, Boodigo ha recibido en torno a 40 solicitudes de compañías del sector y estrellas del porno para poner publicidad, al estilo de Google AdWords, algo que pronto estará disponible en la plataforma.
El buscador ha despertado interés especialmente en EE.UU. y Brasil, así como en países como Italia, Dinamarca, Reino Unido, Canadá y China, aunque Rowntree señaló que la mayoría de las visitas con origen en el gigante asiático no tenían fines lúdicos, sino delictivos.
Texto: EFE