Investigaciones realizadas por la Universidad John Hopkins, en Baltimore, y de la de Nebraska han descubierto que existe un virus causante de la estupidez: el ATCV-1.
Según reportes del diario El Mundo, de España, este virus sólo se había encontrado en algas verdes, las plantas acuáticas simples, unicelulares en su mayoría.
El ATCV-1 altera los sentidos como la conciencia espacial, la atención y la capacidad de discernir del cerebro.
La comprobación de los efectos del virus se realizó en ratones de laboratorio y los infectados se desenvolvían peor que los sanos y en otro que se realizó en humanos un grupo de 92 que fueron examinados, 40 que dieron positivos de ser portadores del virus tenían un 7% de cociente intelectual inferior a los libres del ATCV-1.
El virus pasa desapercibido a lo largo de nuestras vidas y al igual que ocurre en la estupidez en sí, tenemos la capacidad de detectar quién posee el virus, pero somos incapaces de percibirlo en nosotros mismos.
Con información de El Tiempo