UNTALRO es un seudónimo que ha sonado mucho en las redes sociales desde que iniciaron las protestas en Venezuela el pasado 12 de febrero. Un artista que ha querido colaborar desde su trinchera personal con todo el movimiento estudiantil y civil.
La oportunidad de conversar con este diseñador se dio a través del correo electrónico, donde UNTALRO nos contó sobre su día a día y cómo surge la idea de hacer cada pieza. Concretar una entrevista personal resultaría muy difícil en estos tiempos de “justicia injusta” en el que censuran sólo por pensar distinto.
Todo comenzó quizá por la misma razón que tiene una inmensa mayoría de los venezolanos: indignación. “Cómo pretenden que la gente crea tanta farsa“, escribió. Su detonante fue la entrevista que realizara el periodista de CNN, Fernando del Rincón a “El Chino”. “Cuando el personaje se montó esa careta de paz y amor me sentí indignado (…) y así pasa con cada ente, con cada ministerio”.
Este diseñador jamás pensó el alcance que tendrían sus piezas. La primera que realizó fue para su círculo de amigos, pero tuvo efecto de “bola de nieve”, pequeña al principio, pero que ya hoy se ha convertido en la crítica diaria esperada por muchos en las redes sociales. “Cuando mis amigos empezaron a enviarme la pieza diciéndome: la tomé de una “página” o de un “perfil” que ni yo conocía fue que entendí que estaba llegando a la gente”, contó.
Su trascendencia llegó incluso a “Dolar Today”, y la cuenta de “Venezolanos en Miami“, le pidieron que también publicara sus diseños en inglés para tener una mayor audiencia.
En un mundo amarillista —como él mismo lo define— la intención de cada una de sus piezas es tratar de manejarse en lo conceptual y en la realidad de los hechos. “No puedo ser amarillista, crudo, soez, porque ya basta con que toda nuestra realidad y medios así sea. Antes de que entráramos en esta situación, no veía cadenas de muertos, mutilados, accidentes, por ende no puedo expresarme de ese modo”.
En cuanto a la selección de imágenes, UNTALRO no trabaja con fotógrafos especiales ni nada por el estilo, su trabajo lo realiza “con las uñas” buscando las mejores fotos que consiga en internet, de buena calidad y que se relacionen a lo que sucede en Venezuela en ese momento.
Dentro de su trabajo formal y su vida cotidiana, este diseñador se toma cinco horas extras para realizar una pieza diaria, “he tratado de manejar mensajes diferentes cada día, pero tratando de ser tan sutil como lo permite el momento“. Asimismo ha tratado de incorporar las ideas que le dan en las redes sociales sobre un tema en específico.
Está muy claro de que no puede salir a marchar porque es sostén de familia y tiene una novia y una madre muy nerviosas como para ir a la calle, pero su aporte —sin duda alguna— es significativo, más en estos tiempos de autocensura establecida por los medios de comunicación que dejan a la población a ciegas.
“Si por cada pieza, concientizo, llego o cambio a UNA PERSONA, UNA SOLA, habrá valido la pena (…) Sólo espero que salgamos de esto, que Venezuela encuentre paz, que encuentre unidad, y solo nos quede reconstruir … que llegue el día en que pueda decir TERMINAMOS”.
Marcia Arteaga Galazzo
