(Redacción a Todo Momento – Panorama) — Tres semanas de tortura, llanto y dolor bajo las manos despiadadas de su madre. Así fueron los últimos 21 días de la pequeña Zulia
Grito ignorado
Detrás del alto volumen de la música, la mujer ocultaba los gritos desgarradores y el llanto de Jhoana, por el maltrato que le daba, en una pieza de concreto que compartía con su pareja, Gustavo Adolfo Ferrer, de 26 años, desde hacía dos años.
Los vecinos de la calle 126 del barrio La Arreaga, de Maracaibo, donde ocurrió la desgracia, estaban consternados por lo ocurrido. La noticia de la muerte de la niña le dio respuesta a la interrogante que se hicieron esa noche. ¿Por qué sacó a la niña misteriosamente y envuelta en una cobija?
A las 9:00 pm, Montiel salió de la pieza con la niña en brazos. La llevaba cubierta con una manta celeste. Aseguró que “se había caído” e iba al Hospital Chiquinquirá para que la atendieran.
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“Le pidió ayuda a mi mamá y yo la acompañé. Salimos a la avenida y agarramos un taxi. Cuando llegamos al hospital la doctora le pidió que le quitara todos esos trapos y al descubrirla se dieron cuenta que ya estaba muerta”, comentó Yolanda Ferrer, cuñada de la homicida.
Montiel golpeaba y mordía a la niña sin compasión
Le ocasionó múltiples hematomas y marcó su piel con mordeduras como si fueran tatuajes: decía no tener comida para darle.
Lo último que ocurrió en la casa fue que Jhoana ingirió dos vasos de agua que sacó de la poceta, porque tenía sed y su madre no la atendió cuando le pidió algo de tomar.
Testimonio de la abuela
“Ahora comprendo por qué esa mujer no me dejaba ver a la niña. Tenía casi dos semanas sin verla y siempre que preguntaba por ella me decía que estaba dormida. Incluso, muchas veces le preparé sopitas y desde la ventana veía cómo se las tomaba ella y no alimentaba a la niña. Siempre la maltrató”, narró Dalia Ferrer, madre de Ferrer.
Los médicos notificaron inmediatamente al Cicpc, cuyos funcionarios acudieron al lugar y practicaron la detención de la mujer y de su marido por callar las agresiones que sufría la niña.