Según el presidente de la encuestadora Hinterlaces, Oscar Schemel, en Venezuela se está dando una campaña de desestabilización y neurotización que tiene como objetivo la ruptura social en el país.
“Estas estrategias se basan en el uso planificado de la rabia, la incertidumbre y el temor, estimula la irracionalidad, la irritación y la violencia, es lo que llamamos técnicamente clínicas de masas”, aseguró Schemel.
Asimismo, declaró que las estrategias han acentuado la polarización política en el país y que el impacto de la violencia tendrá una naturaleza sicosocial.
Informó que:
– 87% de los venezolanos considera necesario que se sancione a los responsables de los hechos de violencia en las protestas.
– 85% de los venezolanos rechazan las manifestaciones violentas o guarimbas.
– 60% de la población considera el diálogo más importante con los empresarios.
– 60% de los venezolanos está en desacuerdo con la negativa inicial de la oposición de participar en las Conferencias de Paz.
El sondeo, correspondiente al informe mensual Monitor-País, se realizó a través de 1.200 entrevistas directas en hogares entre el 1 y el 7 de abril de este año.