(Redacción A Todo Momento) — Desde hace algún tiempo los altos jerarcas del chavismo en Venezuela han insistido en regular las redes sociales como Facebook y Twitter. Maduro ha dicho que éstas deben adaptarse a “las leyes y los valores de los países”.
¿Pero será que el chavismo está abogando por el bienestar de la sociedad o simplemente no les conviene que se sepa información?
En diversas oportunidades el chavismo a debatido si en Venezuela sería viable hacer un bloqueo del internet al estilo chino. La Asamblea Nacional Constituyente ilegal ha dado vestigios del plan del gobierno que evitaría que la información libre llegue a los usuarios de las redes sociales.
Al Estado venezolano, secuestrado en casi todas sus instituciones por el chavismo; no le conviene que la opinión pública debata los temas de interés nacional. Nicolás Maduro aseguró en una locución del 14 de octubre que las redes sociales no pueden ser “el gobierno mundial” y que a pesar de las normas de cada compañía, “Venezuela debe prepararse para gobernar a favor de los intereses de la sociedad”.
#8Nov @NicolasMaduro Denuncia Campaña de Censura de Twitter y Facebook en su Contra. Ve enemigos por todos lados pero su peor enemigo es el mismo @malascom1045 @giselleviloriak pic.twitter.com/FbYRTCJTRN
— Pedro Paolucci (@paolucci40) November 8, 2017
Las leyes van vía al bloqueo
Luego de la renuncia del presidente Hugo Chávez al poder y el posterior golpe de estado en 2002; los medios de comunicación se han visto más involucrados en la vida nacional. El chavismo entendió el gran poder de los medios de comunicación pues un pueblo ignorante es una masa controlable.
Todo comenzó con la aprobación de la Ley de Responsabilidad Social en Radio y Televisión (Resorte) o “Ley Mordaza” y el posterior cierre de RCTV; la televisora más antigua de Venezuela. A partir de ese momento comenzó la persecución e instigación de los medios de comunicación tradicionales. Cerraron o han sancionado emisoras por procedimientos “administrativos”. También han cerrado periódicos por falta de papel. Además medios impresos y televisoras cambiaron sus líneas editoriales o de dueños para sobrevivir.
Tras la crisis comunicacional en el país y la creación por parte del gobierno de toda una hegemonía comunicacional con televisoras públicas; periódicos propagandísticos y radios; las redes y medios electrónicos se convirtieron en la vía de información obligada de los venezolanos para saber lo que el gobierno no quiere que sepas.
Más recientemente la ley Resorte fue modificada y se agregaron artículos que incluyen a los medios electrónicos. Esta ley busca normar y sancionar las redes electrónica. Dentro de las probiciones del artículo 26 está el desconocer “a las autoridades legítimamente constituidas”.
Además según el mismo artículo “Los proveedores de medios electrónicos deberán establecer mecanismos que permitan restringir, sin dilaciones, la difusión de mensajes divulgados” que contravengan dicha ley.
Usuarios de redes sociales muy críticas con el régimen de Maduro han sido encarcelados. Casos como el de @inesitaterrible han durado meses en la del Helicoide en Caracas por tuitear contra la dictadura.
Lo más reciente
Luego de la elección de una fraudulenta Asamblea Nacional Constituyente; con todos los curúles a manos del Partido Socialista de Venezuela (PSUV) pues la oposición decidió no participar dichos comicios sin garantías; han decidido crear una “Ley contra el Odio”, nombre con un toque distópico a lo “1984″ de George Orwell.
Esta ley tiene 25 artículos y se plantea aplicar una penas de cárcel para quienes promuevan mensajes de intolerancia y odio; además se habló de sanciones para los medios que impulsen la violencia.
La Ley obliga a los medios televisivos a transmitir mensajes 30 por minutos diarios en “favor de la paz”. Además de estar obligados por Ley a emitir mensajes de parte de organizaciones sociales del “poder popular” dentro de ese tiempo.
El texto establece además multas para las personas jurídicas responsables de redes sociales y medios electrónicos que no retiren en un plazo de seis horas mensajes “de odio”; así como sanciones de hasta el 4 % de sus ingresos fiscales brutos a aquellos dueños de medios que se nieguen a publicar contenidos de promoción de la “tolerancia”.
También prohíbe “mensajes de odio, guerra e intolerancia” por parte de usuarios de redes sociales; quienes podrían pagar cárcel por hasta 20 años.
¿Será que en Venezuela no podremos emitir opiniones que no agraden al régimen?
¿Cómo se diferenciará un “mensaje de odio” o una crítica?
¿Llegaremos al nivel de “la gran muralla electrónica” de China?
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