El avión presidencial de México, que no se utiliza desde que el presidente López Obrador asumió el cargo en 2018, será utilizado para transportar a los atletas mexicanos a los Juegos Olímpicos de Tokio, Japón, este verano.
El Boeing 787 Dreamliner lleva tres años en el mercado y aún no se ha encontrado un comprador.
Esta mañana fue trasladado a Victorville, California, para ser sometido a mantenimiento.
El ministro de Economía, Arturo Herrera, dijo que espera que el avión regrese a finales de junio a tiempo para llevar a los atletas a los Juegos, que comienzan el 23 de julio.
También confirmó que el avión sigue en venta y que las Naciones Unidas siguen ayudando a su venta.
En Victorville, la aeronave ha vuelto a un segundo hogar: el avión estuvo almacenado en el aeródromo durante unos 19 meses a la espera de un comprador.
Fue traído a México en julio de 2020 para una rifa, para la cual había sido nombrado como premio, pero al final se otorgaron sumas en efectivo del valor equivalente del avión a los ganadores.
El avión fue comprado por el ex presidente Felipe Calderón por 218 millones de dólares y fue utilizado por el mandatario de la pasada administración, Enrique Peña Nieto.
Los Juegos Olímpicos de 2020, retrasados un año por la pandemia de Covid-19, seguirán adelante a pesar de las protestas en Japón por la reciente oleada de infecciones y los bajos índices de vacunación.