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UN CAMBIO POLÍTICO IMPLICA RECONOCER LAS DEMANDAS DE LA OPOSICIÓN

‪Durante ‬casi dos meses una oleada de protestas conforman el acontecer venezolano. Durante este período se contabilizaron 37 muertos y 559 heridos según un balance difundido por la Fiscal General de la República, Luisa Ortega, el 28 de marzo.

Ramón Guillermo Aveledo, secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad (MUD), opina que mientras el gobierno no dé muestras de entender las causas del descontento y trate de “apagar el fuego con gasolina”, se mantendrán propuestas como plantear un gobierno de transición.

El Monseñor Ovidio Pérez, ex presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, declaró al respecto: “propongo la formación de un gobierno que pueda abrir paso a una gobernabilidad sólida y estable, a través de los mecanismos que posibilita la Constitución”.

La propuesta, bajo la lupa del politólogo e historiador Freddy Rincón es improbable, considera que en el Gobierno no hay una actitud favorable para iniciar un diálogo sobre un posible gobierno de transición.

“No hay disposición en sus palabras que llaman al diálogo pero previamente usan un lenguaje agresivo y violento contra que piensa distinto. Además, la actuación arbitraria de Diosdado Cabello dinamita cualquier posibilidad de diálogo para esa propuesta”, declaró.

El historiador y dirigente de Acción Democrática (AD), Pedro Benítez, está de acuerdo en que se trata de una ilusoria tesis y trae a colación que en la mayoría de los países que vivieron gobiernos de transición, quienes ostentaban el poder no fueron intransigentes, reconocieron la legitimidad de sus detractores y acordaron soluciones viables. “Es posible más adelante. El gobierno se ha deteriorado, pero no lo suficiente”, aseguró.

Opina que los planteamientos del Movimiento Estudiantil son mucho más viables: renovar los poderes públicos, liberar a los presos políticos, cesar la represión, cumplir la Constitución  y desarmar a los colectivos.

Aveledo está de acuerdo en que es indispensable rescatar la institucionalidad: “El país necesita que la Constitución recobre su vigencia efectiva con instituciones que funcionen para todos por igual”.