El presidente de Samsung Electronics, Lee Kun-hee, continúa en condición estable pero todavía no ha recuperado el habla, a más de un mes de sufrir un infarto que le ha mantenido ingresado desde entonces, informó hoy el Grupo Samsung.
El magnate surcoreano “reacciona a los estímulos externos” y “realiza algunos movimientos”, indicó a EFE una portavoz del conglomerado empresarial, que citó el último informe de los doctores del Centro Médico Samsung de Seúl donde se encuentra ingresado.
Sin embargo, Lee “no puede comunicarse completamente” a pesar de estar despierto durante parte del día, aseguró la portavoz, que sugirió que el empresario de 72 años todavía no ha recuperado el habla.
En todo caso, añadió, el presidente de Samsung Electronics considerado líder de facto del Grupo Samsung está mostrando una “lenta” pero “continua” recuperación y se encuentra en “condición estable”, según la portavoz, ocho días después de que el 10 de junio recuperara el movimiento en sus extremidades.
Fue un mes antes, el pasado 10 de mayo, cuando el empresario sufrió un infarto y fue trasladado de urgencia a un hospital cercano a su domicilio, donde recibió un tratamiento de reanimación cardiopulmonar (RCP).
Después fue reubicado en el Centro Médico Samsung, donde se le practicó una operación para ensancharle las arterias y se le sometió a un tratamiento de hipotermia, que lo mantuvo dormido hasta que recuperó la consciencia a finales de mayo.
El suceso desató las especulaciones sobre el futuro del Grupo Samsung, el mayor conglomerado empresarial de Corea del Sur con unos 270.000 empleados en todo el mundo, fundado en 1938 y gestionado desde entonces por la familia Lee.
El mayor candidato para suceder al presidente de Samsung Electronics es su hijo Lee Jay-yong, que actualmente ocupa el puesto de vicepresidente de la compañía.
Además de la electrónica, Samsung abarca una amplia gama de sectores como industria pesada, construcción naval, productos químicos o servicios financieros, médicos, de turismo y entretenimiento.
Texto: EFE.