Según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), por importación de carnes (CIF)- con impuestos y fletes-, en 1998 se pagaron 9.069.946 dólares (U$S); 10.380.351 U$S,en 2003; y, en 2013, 1.976.631.858. USS. Es decir, de 1998 a 2013, se produjo un aumento de 21.693,2121%, o lo que es lo mismo, aumentó 216 veces.
¿Y qué ha pasado con la exportación de carne? También según el INE ha disminuido en un alucinante 99,36%
Hay una extrema dificultad para ubicar los datos sobre la producción de carnes, los retrasos en la publicación y las enormes diferencias entre la data de organismos oficiales, dificulta al extremo cualquier investigación.
Por eso, para el aspecto de la producción hemos usado la data de la inefable Fedenaga, asociación burguesa que agremia a la mayoría de ganaderos de la nación.
Según esta patronal la producción de carne para el año de 1998 fue de 407 mil toneladas, para el año 2012 fue de 360 mil toneladas. Si son cierto estos datos, ello quiere decir que hubo una sensible disminución de 12% en la producción. Por ende, podemos deducir que está producción nacional se le ha agregado la importación, lo cual implica que los anaqueles destinados a la venta de cárnicos deberían estar rebosantes. Sin embargo, ha sucedido exactamente lo contrario.
Con información de Tribuna Popular