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CARVAJAL DESPERTÓ EL FANTASMA DEL CASO MAKLED EN GOBIERNO VENEZOLANO

Hace unos años, el líder de una red de narcotráfico puso en jaque a la cúpula del gobierno de Chávez, cuando mencionó a los funcionarios que colaboraban en sus negocios. Maduro teme que se repita la historia.

Walid Makled fue extraditado a Venezuela el 9 de mayo del 2011, después de haber sido detenido en Colombia el 19 de agosto del 2010, acusado de ser la cabeza de un cartel de droga de alcance internacional.

Durante el tiempo que pasó detenido en Colombia, Makled otorgó entrevistas a la prensa en dos oportunidades, en las que aprovechó sus declaraciones para salpicar de escándalos al gobierno.“Si yo soy narcotraficante, entonces todo el gobierno de Chávez es narcotraficante”, dijo en ese momento.

Makled confesó haber pagado cerca de un millón de dólares a funcionarios civiles y militares, además de participar del intercambio de favores con personajes que iban desde el Ministro del Interior hasta el gobernador de Carabobo.

Hugo Carvajal fue señalado entonces por Makled como parte de la nómina de más de 40 generales del ejército a los que el líder narco pagaba una cuota semanal de dinero a cambio de sus favores para facilitar el tráfico de cocaína.

El caso Carvajal

Cuando Makled llegó extraditado a Venezuela en mayo del 2011, el gobierno de Chávez se dispuso a enterrar su caso para siempre. Y así fue. Nunca más se supo nada del pago de sobornos, ni de acusaciones de ningún tipo contra funcionarios oficialistas. Makled no volvió a hablar, y en la actualidad sigue encerrado en alguna cárcel venezolana.

No cuesta suponer que la defensa cerrada e inmediata de Nicolás Maduro ni bien se conoció la noticia de la detención de Hugo Carvajal en un aeropuerto de Aruba tuvo algo que ver con el fantasma de Makled.

“Me la juego con Carvajal y lo defenderé con toda la fuerza del Estado”, dijo Maduro el jueves, al mismo tiempo que calificó la detención por parte de la DEA de “secuestro”. Es que Maduro no tiene el margen que tenía entonces Chávez para enterrar al capo narco y a sus acusaciones en un abrir y cerrar de ojos.

El politólogo y analista venezolano Carlos Romero supone que el único motivo que tiene el gobierno para defender a Carvajal y tratar de que regrese a Venezuela es evitar que “cante”.

“A lo largo de los años, Carvajal siempre fue considerado como “un hombre en la cuerda floja”, explicó el especialista. Además de la acusación de Makled, Carvajal formaba parte desde 2008 de la lista de militares venezolanos acusado por el Departamento del Tesoro de EEUU por estar vinculados al narcotráfico y la guerrilla.

Más allá de los diferentes cargos que ostentó, explica Romero, nunca se conoció a ciencia cierta cuáles eran las funciones que efectivamente ejercía para el gobierno venezolano. “Es un personaje rodeado de leyendas y mitos sobre sus vinculaciones con grupos paramilitares, la guerrilla y el narcotráfico”, detalló.

Sobre este tema, el periodista del diario venezolano El Nacional, Ramón Hernández, apuntó que a pesar de ser un hombre clave del gobierno en materia de inteligencia dentro y fuera del país, el último tiempo Carvajal estaba disgustado porque los cubanos lo habían sacado del juego.

“Aunque nunca se confirmó, distintos rumores apuntaban a que Carvajal había amenazado con irse a Estados Unidos por los disgustos que tenía a raíz de la ingerencia de los cubanos en la inteligencia y la política venezolanas”, relató Hernández.

Romero coincide: “Durante el últimos tiempo, en Venezuela había un grupo de militares, algunos activos y otros retirados, que presionaban para una menor relación con Cuba, y se podría decir que Carvajal era parte de este grupo”.

¿Por qué Hugo Carvajal es importante ahora?

Esa es, para Carlos Romero, la pregunta que se impone ahora que Carvajal se encuentra detenido en Aruba y a la espera de que Estados Unidos pida su extradición o de que Venezuela logre su regreso. Y para responderla, baraja dos hipótesis. La primera, sostenida por la cúpula del gobierno de Nicolás Maduro, plantea que Estados Unidos y los Países Bajos -a cargo de la Defensa en Aruba-, de manera coordinada, decidieron asestar un golpe a Venezuela y Carvajal fue solo la excusa para esto.

La segunda hipótesis, de acuerdo con Romero, es la de la entrega voluntaria de Carvajal debido a su malestar y su descontento con las decisiones tomadas por el gobierno. A partir de un acuerdo con la DEA, en esta hipótesis, podría pensarse que “El Pollo” se libraría de cargos y lograría protección en algún lugar fuera de Venezuela, y lejos de los funcionarios chavistas que lo quieren en silencio.

Si este es el caso, entonces esta es una historia que recién comienza. Porque si Makled es un fantasma para el gobierno venezolano, también lo es para los Estados Unidos, que en ese momento perdió una valiosa fuente de información sobre las redes de lavado y narcotráfico que operan en Latinoamérica. Y podemos suponer que ahora hará todo lo posible para que la historia no se vuelva a repetir.

Vía, Infobae.